Todos hemos escuchado en alguna ocasión que para establecer comparaciones hay que ser riguroso y comparar «peras con peras y manzanas con manzanas», pues bien, ni siquiera esto es garantía de éxito si de la comparación de alimentos frescos hablamos. El análisis de precios, posterior al simple registro del dato, en alimentación es una tarea compleja que va más allá de una simple comparación numérica. La gran variedad de productos, marcas, formatos y, sobre todo en el caso de los frescos, las innumerables variables que influyen en su precio, hacen del trabajo de comparación de datos un quebradero de cabeza para los fabricantes o distribuidores y un desafío constante para empresas como Merca Dinámica.
Uno de los mayores obstáculos en este proceso es el matching de productos. ¿Cómo asegurar que estamos comparando manzanas con manzanas? Dos productos, aparentemente iguales, pueden variar en formato o presentación lo que dificulta establecer una comparación precisa. En el caso de los frescos, esta complejidad se multiplica. Distintas variedades, denominaciones de origen, calibres, tipos de corte y presentaciones hacen que comparar un kilo de manzanas con otro, un kilo de patatas lavadas con un kilo de patatas limpias, o un kilo de ternera gallega con un producto similar, sea una tarea que requiere una gran precisión y conocimiento del mercado. Desde el tipo de tomate (raf, pera, cherry) hasta el tipo de corte de la carne (filete, solomillo, picadillo), cada detalle cuenta.
Merca Dinámica ha desarrollado a lo largo del tiempo una metodología robusta para abordar este desafío. Gracias a nuestra amplia red de agentes distribuidos por toda la Península e Islas, podemos realizar un seguimiento exhaustivo de los precios en el punto de venta. Nuestros agentes en campo en una primera observación son capaces de identificar las características de cada producto y establecer los criterios de comparación más adecuados; posteriormente el trabajo de análisis de los datos recibidos, mediante el uso de algoritmos avanzados para identificar productos equivalentes, incluso cuando las descripciones de producto son diferentes, permite refinar aun más la información para ofrecer a nuestros clientes contenidos de la máxima calidad.
Es este un trabajo metódico y cargado de dificultad en el que los resultados son como un iceberg, el grueso del trabajo interno queda por debajo de la línea de flotación para que los clientes se puedan beneficiar de un paquete de información simple y ajustado a sus necesidades.